Jennesse -Privado-

por **Gackt** Mar Ago 07, 2012 5:29 pm

La verdad era que poco me interesaba su estúpida guerra. Para mí, no tenia ni perdida ni beneficio propio y mientras que no descubriera que había algo benefactor para mí en “ayudarles” entonces simplemente no haría nada. Agradecidos debían estar que solo en contadas ocasiones tuvieran mi presencia en el mundo mortal cosa que precisamente ese día no haría. Normalmente acostumbraba estar en el castillo y cuando mi aburrimiento era demasiado, salía directamente al purgatorio.

Extrañamente ese día había dormido unas horas más de lo acostumbrado y desperté con una molesta sensación de fastidio. Había debatido el quedarme mejor en mi habitación a salir y tener que ver a los demás demonios que habitaban el lugar y que se la pasaban hablando de conquistar aquí, allá… aburrido, si realmente deseaban obtener algo para ellos, simplemente tenían que tomarlo, no pensar como quitárselo a los demás; pensamiento que le daba el poder del sitio al contrario y esa no era la idea. En fin, opte por levantarme ya me había cansado de estar acostado y esa sensación no se iría hasta no encontrar algo de mi diversión así que finalmente salí de la cama y tome algo de ropa de entre mis cosas.
Me atavié con aquellas prendas y salí sin más de mi habitación. Obviamente, ya conocía el castillo, en un decir, al derecho y al revés pero de entre todas sus habitaciones solo había una en la que me sentía realmente cómodo.

Aquel estudio era tan privado cuando todos salían que podía ir a encerrarme un rato sin que nadie me molestara, y eso era precisamente lo que necesitaba en aquel momento. Antes de ir al estudio, fui a tomar una botella de licor, whiskey precisamente y un pequeño vaso. Eso era suficiente para pasar un tranquilo rato en aquel sitio de mi predilecta elección y una vez en el tome asiento tras aquel enorme escritorio que adornaba el sitio.

Abrí aquella botella de licor, serví solo un poco en el vaso mismo que sostuve en una de mis manos y con ligeros movimientos giraba el líquido en el interior de aquel vaso. Esboce una pequeña sonrisa de medio lado y detuve abruptamente el mover de aquel vaso para así poderle llevar a mis labios y dar un rápido sorbo del alcohol. Me di todo el tiempo para saborearlo y al mismo tiempo me recargaba completamente sobre el respaldo de mi asiento, eche mi cabeza hacia atrás recargando mi nuca por completo y cerré mis ojos tranquilamente. No dormía, ya lo había hecho bastante, solo descansaba y me relajaba en aquel sitio mientras aun degustaba el robusto sabor del licor sobre mi lengua.

por **Koichi** Mar Ago 28, 2012 4:31 am

Particularmente ese día todo estaba demasiado callado dentro de el castillo, como si la mayoría hubiera decidido salir al mismo tiempo.
Sabía que por ahí debía de toparme con alguien pero en realidad no tenía muchas ganas de buscar si no más bien quería recorrer aquellas salas que no había tenido oportunidad de ver antes como lo era el estudio principal donde se guardaba una gran cantidad de libros y el escritorio localizado en el centro de este era perfecto para pasar un gran rato ahí.
Así que sin perder más tiempo salí de mi habitación después de haberme alistado, encaminándome en los tranquilos pasillos hasta el lugar esperado, el cual encontré con la puerta ligeramente abierta y aunque tan solo fuera una rendija era suficiente para dejarme ver el interior del despacho, notando como este no se encontraba vacio.
De inmediato pensé en darme la vuelta e ir a la puerta consiguiente, pero la idea de ver quien era aquel desconocido era más tentadora que seguir pasando el día por mi cuenta.

Silenciosamente y aprovechando que él había cerrado sus ojos me escabullí dentro del estudio, brincoteando en puntillas para evitar hacer algo de ruido y no alertarlo de mi presencia con el fin de llegar hasta donde se encontraba. -Uhm..que tranquilo~- ladeé mi cabeza un poco, mordiendo mi labio inferior mientras decidía si hacerme notar o jugar otra clase de travesura.
Al final decidí hacer lo segundo, inclinándome de manera sigilosa en el escritorio y tomando con rapidez la botella de extraño y fuerte olor que parecía ser del mismo contenido de su vaso.

Ya con la botella en mano me alejé de vuelta del escritorio hasta esconder aquel objeto detrás de uno de los libreros, lugar donde también fingí que prestaba atención a un libro, como si estuviera totalmente ausente de su presencia tanto él la estaba de la mía...o al menos eso esperaba para así no ser descubierto tan rápido y seguir con ese pequeño juego

.

por **Gackt** Miér Ago 29, 2012 12:11 am

Disfrutaba de la calma del sitio. De entre todas las habitaciones en las que había estado esa precisamente me agradaba por el aire que me transmitía; además de que era poco frecuentada lo que la hacia perfecta para momentos en los que únicamente deseaba estar tranquilo y por supuesto, a solas. Sin darme cuenta había llevado mi brazo derecho a cubrir mis ojos aunque claro aquello no limitaba que bien pudiera abrir los ojos y me diera la oportunidad de dar un vistazo al entorno donde ahora me encontraba.

El tiempo pasaba y aquel fastidio con el que me había despertado lentamente iba desvaneciéndose, dejando en su lugar una placentera sensación de calma. Pese a muy tranquilo y absorto en mi tranquilidad que estuviera, aquello no me privaba de estar atento a lo que ocurría a mi alrededor por ello no me fue difícil darme cuenta de la nueva presencia que me acompañaba, por mas que esta quisiera ocultar al menos su presencia física, ya que, obviamente se trataba de otro demonio del lugar que quizá andaba sigiloso para que no me diera cuenta de su prencensia pero que no había tenido en cuenta que bastaba con sentir ese destello de su aura para darme cuenta de que ahí estaba.

Aprovechando que mi brazo cubría mis ojos, me di la oportunidad de entreabrir estos apenas un poco; formando unas pequeñas rejillas en mis ojos para entrever a aquella figura que se empinaba en la mesa para robar la botella que había llevado al sitio. Bufe internamente ya que, quizá su intención había sido mas que nada la de gastar una broma y la verdad era que en ese instante no estaba para bromas. Trate de controlarme para no reaccionar de inmediato y solo hasta que le vi perderse en aquel librero fui retirando el brazo que cubría mis ojos.
-Vaya, no tenia idea de que hubiera ratas en el lugar…-
Dije al aire al observar el sitio vacio donde anteriormente estaba la botella.

Negué suave con la cabeza y me incorpore con calma en mi sitio para poder llevar mi codo derecho hacia el escritorio que tenia delante mi y seguí por apoyar mi mejilla del mismo lado en el dorso de mi mano. No le preste ni dirigí la mirada a aquel pequeño demonio, me concentre en tomar con mi otra mano el vaso de licor y lo poco que quedaba en este le hice contonearse de lado a lado con el ligero mover de mi mano.
-Es una pena, esa botella me hubiera servido para quedarme aquí y disfrutar el lugar…-
Seguí hablando al aire, después de todo, hacia como aquel demonio al que ni siquiera me había tomado la molestia de echar un vistazo para ver como era o algo así, y permanecí así, ausente de su presencia, dejando esta completamente en segundo plano para mi atención.

-Bien, supongo que terminare esto… y me retirare…-
Suspire con algo de pesadez y eleve aquel vaso que sostenía mi mano para llevarle a mis labios, y darle un pequeño sorbo.

por **Koichi** Vie Feb 01, 2013 12:12 am

Aquella era quizás una de las razones por las cuales no me interesaba en lo más mínimo la guerra por la tierra, ya que había afectado terriblemente lo divertido que antes era el castillo y ahora tenía que lidear con actitudes como esas. Aunque claro estaba que no lo dejaría pasar y mucho menos irse sin al menos averiguar de quien se trataba, así que antes de que terminara su trago decidí salir de mi posición solamente asomando mi cabeza.
-Deberías de tener mucho más cuidado~ En lugar de una rata pudo ser un apestoso ángel, pero afortunadamente pude recuperar la botella- Asomé mi lengua solo lo necesario para lamer suavemente mis propios labios mientras que caminaba fuera de aquel librero para acercarme hacia él y colocar de vuelta la botella en la mesa, la cual sirvió para sentarme ahí de frente a él con total naturalidad sin siquiera pedir permiso por eso. Porque debería? Si por lo regular cada quien hacia lo que quería en el castillo.

-"Soy Koichi, oh y no tienes que agradecerme por mi buena acción del día, no es necesario."- Me incliné en mi lugar mientras que cruzaba mis piernas de manera un tanto infantil al estar perfectamente flexionadas una sobre de la otra, donde coloque mis codos sobre mis rodillas para apoyar mi mentón en mis manos. -"Y tú eres?"

por **Gackt** Mar Feb 26, 2013 6:45 pm

—O algo peor — Contesté tras lo dicho en primera instancia por aquel demonio y dejé que mi mano guiara aquel pequeño vaso de nueva cuenta hacia el escritorio. Lánguidamente fui retomando mi lugar pegando de lleno mi espalda al respaldo de aquel sofá donde estaba cómodamente sentado y me dispuse a concentrar mi atención en el contrario.

Lo primero que hice fue recorrerle con la mirada; mis ojos dieron un pequeño recorrido a su anatomía antes de posarse en su mirar dedicándole el propio con un dejo de severidad mientras que mis labios lo contrastaban con una afable sonrisa. Exhale por la nariz, dejando que un pesado aire se escapara de ella al ver como el más bajo tomaba tan familiarmente el asiento delante de mí; siendo sincero me chocaba la gente así, con tan pocos modales, si bien, era un sitio donde los demonios hacían lo que les venía en gana pero que yo recordara ninguno era alguna clase de vástago salvaje como para no tener la educación adecuada al estar frente a un desconocido.

Llevé mis brazos a los del mueble donde estaba sentado y dejé que los dedos de mi mano derecha comenzaran a tamborilear mientras esperaba atento que el peli-rosa terminara de hablar y ciertamente había algo en ellas que me molestaba. Repetí sus palabras en mi cabeza, digiriendo cada una de ellas, procesándolas con calma mientras mis orbes se enfocaban en los ajenos y justo tras analizar aquella interrogante que dejó de último, encontré eso con su dicción que me hacía fruncir ligeramente los labios.
La botella que había tomado, aquella falta de educación ante la primera impresión, sí, todo eso podía dejarlo pasar por alto ya que desde lo primero había dejado de considerarle un igual para ponerme a discutir quizá, pero eso ¿Me tuteaba? Negué suave con la cabeza y una ligera y furtiva risa hastiada salió de entre mis labios mientras me apoyaba en el borde de los brazos de aquel sofá para ponerme de pie. Miré al menor desde arriba y alcé las manos en los bolsillos de mi pantalón.

—Deberías volver a los libreros, pequeño demonio; busca uno que hable sobre modales léetelo todo y si aprendes algo te dejaré volver a encontrarme…—Curvee la comisura de los labios mostrando una sutil sonrisa ahora aderezándole con un dejo afable—. Pedirás permiso para sentarte frente a alguien que no conoces, quizá hasta aprendas a no tomar lo que no es tuyo, ¡oh! Y si tu empeño te ayuda, aprender a no ser tan confianzudo como para tutearme, entonces yo me presentare de la manera adecuada respondiendo a tu educación. Pero por lo pronto búscate a alguien más para jugarle tus tretas que yo no estoy de humor—. Culmine mi oración con algo de severidad y tras una pequeña venía con la cabeza meramente por compromiso me dispuse a emprender el paso hacia la salida de aquella habitación—.

por Contenido patrocinado

Jennesse -Privado-

Jennesse -Privado-

Re: Jennesse -Privado-

Re: Jennesse -Privado-

Re: Jennesse -Privado-

Re: Jennesse -Privado-

Re: Jennesse -Privado-